La emergencia sanitaria ocasionada por el coronavirus ha obligado a distintos gobiernos a adoptar medidas de prevención para evitar la propagación, una de las más famosas es la cuarentena y/o aislamiento preventivo obligatorio.
Esta medida ha provocado la re-invención de tareas cotidianas para convertirlas en actividades en casa. Uno de los retos más grandes lo tienen los padres, pues deben ayudar a sus hijos a canalizar, dentro del hogar, la energía que antes invertían para las actividades al aire libre.
Es por esto que hoy te traemos 3 juegos que puedes replicar en casa para distraer a tus pequeños:
Construir castillos y/o ciudades
Haciendo un poco de espacio en la sala y con algunos elementos como cajas, cartulinas o legos, es posible recrear las torres de un castillo o los edificios de una ciudad. La pintura y la plastilina pueden ayudar a recrear puertas y ventanas. El objetivo de este juego es permitir que el niño/a explore nuevas formas y deje volar su imaginación, mientras se divierte.
Búsqueda del tesoro
En este juego puede participar toda la familia. En primer lugar, se debe escoger un 'Pirata Líder', que será el encargado de esconder un objeto que todos conozcan en algún lugar de la casa y dibujar un mapa que contenga todas las habitaciones de la vivienda.
Una vez iniciada la búsqueda, el 'Pirata Líder' deberá empezar a dar pistas sobre el lugar donde se encuentra escondido el objeto para que los demás piratas lo puedan encontrar. Los piratas buscadores deberán marcar en el mapa los lugares en donde ya han buscado.
Títeres
Algunas medias viejas, camisas que no salgan del fondo del clóset y/o prendas de vestir que ya no usen, son los elementos ideales para darle vida a un personaje en forma de títere. Esta actividad no solo refuerza sus habilidades manuales, sino que es una carta abierta para que los niños creen historias.
Con botones, lana y algunos retazos de tela, puede crear los ojos, cabello e incluso ropa de los personajes. Los elementos para personificarlos son completamente libres. Luego de que los títeres estén listos, improvise un pequeño teatrino con la mesa del comedor y... ¡que comience la función!
Fuente: Revista Semana (bit.ly/2RBpx4n)